Dónde comer en Ámsterdam

Considerado por TripAdvisor como el mejor sitio para comer de toda Ámsterdam, Broer es un restaurante algo alejado del centro pero que bien merece una visita entre amigos. De ambienta cálido e informal, es un lugar apto para todo tipo de públicos y planes: juegos en grupo, familias que busquen alternativas a McDonalds o foodies que se dejen seducir por sus opciones vegetarianas, hamburguesas o una acertada selección de cervezas que suponen el perfecto clímax a un largo día recorriendo la ciudad. Muy recomendable.

¿Os imagináis una cena en el mes de julio entre farolillos en mitad de un jardín eterno? ¿Con platos de elaboración homemade a base de productos de temporada? O, ¿quizás mejor un desayuno entre pasteles de manzana y zumos de fruta antes de marcharse a recorrer la ciudad? Merkelbach es todo eso y mucho más. Un restaurante que potencia el concepto de slow food desde el interior de una típica mansión holandesa del siglo XVIII rodeada de zonas verdes en las que sucumbir al verano holandés.

Junto al Sarphatipark existe un local discreto, similar a ese bar que puedes encontrar en tu barrio, cuyo interior encierro aromas exóticos. La carta del CousCous Club se nutre de tan solo tres tipos de este típico plato árabe, destacando un cous cous de cordero que atrae a media ciudad de Ámsterdam. De ambiente distendido, ideal para combinar delicias del Lejano Oriente con botellas de vino y charlas entre amigos, este restaurante se convertirá en uno de esos pequeños grandes descubrimientos gastronómicos a vuestro paso por la ciudad.

Ubicado en pleno centro de Ámsterdam, entre Jordaan y el Barrio Rojo, Letting se ha convertido en el oasis de cualquier foodie tras una ruta por los canales de la ciudad. En Letting tienen cabida desde una de los mejores brunchs de la ciudad (aderezado de té, si es posible) hasta una selección de tortillas, sopas y ensaladas (la de queso de cabra frito con miel y frutos secos es la gran estrella) en un ambiente agradable, similar al de la cocina de tu madre o tu abuela. Y si puedes disfrutarlo desde su terraza, en mitad del ambiente de la ciudad, mucho mejor.

Brouwerij ‘t IJ

La mayoría de viajeros que llegan a Ámsterdam buscan degustar la mejor cerveza de su vida, y posiblemente sea en este bar donde la encuentren. Situado junto al molino de Gooyer, el único que sobrevive de los cinco existentes en la zona de Plantage, Brouwerij’t IJ es el único local de la ciudad que elabora su propia cerveza, en concreto hasta siete tipos diferentes, destacando las ya míticas «Zatte» o «Natte». Sabores diferentes a complementar con aperitivos de queso o embutido típico en un ambiente mágico, a caballo entre dos épocas.

Ciel Bleu

Ferdinand Bolstraat 333

Los paladares más exquisitos encontrarán en este restaurante el cielo literal que vinieron a buscar. Regentado por el popular chef Onno Kokmeijer, ganador de dos estrellas Michelín con apenas treinta años, Ciel Bleu es un espectáculo culinario alojado en pleno corazón de Ámsterdam donde se sirven platos tan dispares como ostras con flor de saúco o palomo aderezado de crema de pistacho. Un «cielo azul» cuyo nombre mucho tiene que ver con su ubicación en la planta 23 del que es uno de los edificios más altos de Ámsterdam, asegurando vistas de infarto.

Omelegg

Ferdinand Bolstraat 143

Ubicado en pleno centro de Ámsterdam, este cálido lugar es ideal para un desayuno o un bocado rápido a vuestro paso por la ciudad. Tal y como su nombre indica, aquí las tortillas son la especialidad, existiendo todo tipo de variedades; eso sí, todas ellas enormes e ideales de acompañar de tostadas con mantequilla o un café. Aunque la cola para acceder suele ser larga, la rotación de sus camareros y la preparación de los platos es rápida. De hecho, seguro que volverás en más de una ocasión.

Gs Brunch Boat

Keizersgracht 177

A la hora de preguntarse dónde comer en Ámsterdam, las opciones son muchas, pero rechazar la opción de comer en el único brunch boat del mundo puede ser un sacrilegio. Llueva o haga sol, cada día el Gs Brunch Boat parte de keizersgracht 177 ofreciendo un menú de 39.50 euros en el que se incluyen bebidas con o sin alcohol, deliciosos huevos benedictinos o bagels rellenos. Ideal para disfrutar del buen tiempo y adentrarse por los secretos de la ciudad mientras degustamos los mejores sabores.

¿Te gustaría realizar un crucero por los canales de Ámsterdam?

Hap Hmm

Eerste Helmersstraat 33

No lejos del Rijksmuseum, existe un restaurante para aquellos bolsillos ajustados que busquen un buen bocado típico sin necesidad de gastar 40 euros por plato. En Hap Hmm se sirven platos sencillos a base de carne y patatas por no más de 6 euros y al estilo de tu abuela. Una de las opciones gastronómicas más económicas de la ciudad sin necesidad de renegar a una buena calidad y un ambiente inconfundible, similar al de aquel comedor en el que una vez creciste.

Tomo Sushi

Reguliersdwarsstraat 131

Ámsterdam puede convertirse en el mejor marco a la hora de adentrarse en sabores internacionales, y la cocina de Japón no se queda atrás. En una ciudad con numerosos restaurantes orientales de precios de todo tipo, el Tomo Sushi es posiblemente la mejor opción calidad-precio. Sus sushis especiales, como el Rainbow, se convierten en toda una delicia a degustar en este local amable y tranquilo de mil y un sabores.

A la hora de descubrir dónde comer en Ámsterdam, la ciudad despliega una selección de restaurantes, bares y cervecerías con estilo propio entre las que contentarse con un suculento brunch, cenar en un jardín secreto o descubrir que hay todo un mundo de la cerveza por descubrir.

¿Cuáles son tus restaurantes favoritos de Ámsterdam?