Keukenhof, el mayor jardín de tulipanes

Si hay un elemento que caracterice a Holanda ese es el tulipán, flor que encuentra en este país el perfecto lienzo sobre el que esculpir alfombras naturales llenas de colores y encanto. Y posiblemente el mejor lugar para contemplarlos cuando se acerca la primavera sea Keukenhof, el mayor jardín de tulipanes del mundo situado a pocos kilómetros al suroeste de Ámsterdam. ¿Te vienes con nosotros?

Keukenhof: mil y un colores

Fotografía: Adriano Aurelio Araujo

En algún lugar entre las localidades de Lisse  e Hillegom, a 45 kilómetros al suroeste de Ámsterdam, existe un lugar que cada año, al comenzar la primavera, se colma de colores desplegados hasta un horizonte que burla la vista de cualquier fisgón. Un encanto único que convierte a Keukenhof («el jardín de la cocina» en neerlandés), el mayor jardín de tulipanes del mundo en uno de los must a visitar durante vuestro paso por el país de los molinos.

A lo largo y ancho de las 32 hectáreas que conforman Keukenhof se aglutinan hasta 7 millones y 800 variedades de tulipanes cultivados por los locales desde el siglo XVII en la que es una de las tradiciones más típicas de Holanda, si bien no faltan otras flores como el iris, la orquídea o los jazmines que convierten este lugar en todo un éxtasis floral.

El  nombre de Keukenhof fue acuñado en el siglo XV por Jacoba van Beieren, más conocida como la condesa Jacqueline de Bavaria (1401 – 1426), una noble que solía recolectar frutas y verduras de las colinas de su propiedad, el Teylingen Castle, para llevarlas a su cocina, motivo que inspiraría el nombre en neerlandés por el que es conocido este jardín actualmente.

Tras su muerte, el jardín sería entregado a diferentes familias de comerciantes que contratarían finalmente a un jardinero paisajista para aportar a Keukenhof el diseño que luce hoy día, tomando diferentes influencias del paisajismo inglés. Y es que una de las características más peculiares de este edén holandés reside en las formas geométricas que cada año tratan de emular un motivo diferente a través de las flores, resultado de un movimiento artístico llamado «De stijl», surgido en Holanda a principios del siglo XX como forma de combinar la sobriedad arquitectónica del país con nuevas expresiones coloristas.

Sin embargo, no sería hasta 1950 cuando Keukenhof abriría sus puertas al público de manera oficial con motivo de la llegada de un grupo de exportadores de flores que buscaban hacer una exhibición. Tan solo en su primer año fue todo un éxito, con más de 236 mil visitantes recorriendo sus alfombras florales. Con el tiempo, el recinto pasó a confirmar el potencial del que es uno de los grandes orgullos de Holanda.

Pero como todo lo bello, Keukenhof también es efímero, por ese motivo el jardín permanece abierto generalmente entre seis y ocho semanas, desde finales de marzo a mediados de mayo, siendo los primeros días de este último mes el mejor período para acercarse al jardín desde la cercana Ámsterdam.

La próxima cita será del 22 de marzo al 13 de mayo de 2018.

Y ya os avisamos que cuanto antes compréis las entradas, mucho mejor.

Explorando Keukenhof

Además del atractivo turístico que Keukenhof supone, el jardín más famoso de Holanda fue concebido en su momento como un perfecto lugar de encuentro para empresarios del sector floricultor, respetando la esencia del motivo que cimentó la fama del jardín durante los años 50.

Profesionales del paisajismo que convierten Keukenhof en una de las mejores opciones para visitar si vas a pasar unos días en Ámsterdam, ya que diversos autobuses, además del oficial Keukenholf Express Buses, parten desde varios lugares de la ciudad como Haarlem o Leiden, además del aeropuerto de Schiphol, con trayectos que apenas superan los 30 minutos.

El precio de la entrada es de 16 euros para adultos y de 8 para niños de 4 a 11 años, mientras su horario se extiende desde las 8 de la mañana hasta las 19:30. La taquilla se cierra a las 18:30, por lo que será mejor acudir lo antes posible (y también hacerlo a la hora de reservar las entradas, ya que el limitado período de apertura y el aluvión de visitas consumen el aforo del jardín semanas incluso antes de su apertura).

Surcado por canales que incitan a tomar una barca y perderse entre las colinas floridas, Keukenhof incluye zonas de picnic como Mill, además de otros interesantes puntos como Juliana, donde se ofrece información acerca de las diferentes especies de flores, o Beatrix, área en la que se representan diferentes shows florales en los que la orquídea es la gran protagonista. Estos y otros puntos de interés podréis encontrarlos en el siguiente mapa de Keukenhof.

Adaptado al turismo accesible, Keukenhof también facilita el alquiler de sillas de ruedas eléctricas y ofrece taquillas para que los visitantes puedan depositar sus pertenencias antes de acceder al área.

Keukenhof, el mayor jardín de tulipanes del mundo supone un mosaico de colores y contrastes único para todo aquel que decida visitar nuevos lugares no tan lejanos de Ámsterdam y busque maravillarse con la mejor representación de la primavera. Una época del año en la que Holanda gira en torno a las flores, a su belleza y a la celebración de los colores como mejor forma de unir al mundo.

¿Te gustaría visitar Keukenhof?